El procedimiento general para determinar los impuestos diferidos de acuerdo a la Norma de Información Financiera mexicana (NIF D-4 “Impuestos a la utilidad”) y Norma Internacional de Contabilidad (NIC 12 “Impuestos a las ganancias”), se basa en el método de activos y pasivos, consiste en comparar valores contables y valores fiscales de todos los activos y pasivos para identificar diferencias temporales, tanto deducibles como acumulables, a las que se aplica la tasa impositiva de impuesto sobre la renta correspondiente.
Sin duda muchas de las empresas en México (y quizás en el mundo), se encuentran en una situación difícil derivado de la pandemia ocasionada por el COVID-19. Esta situación ha traído incertidumbre en el comportamiento de diferentes rubros del balance general de las empresas y puede tener serias repercusiones en los cálculos de impuestos diferidos, entre las principales consideraciones que nosotros anticipamos están:
- Cuentas por cobrar: La diferencia temporal por la reserva de pérdidas crediticias esperadas puede verse afectada, derivado de la difícil recuperación de las carteras y para la cual las empresas debieran incrementar dichas estimaciones.
- Inventarios: Es posible que existan complicaciones en la venta de inventarios y como resultado, pudiese ser necesario el registro o incremento en reservas de inventarios obsoletos o de lento movimiento; incluso el registro de un deterioro, que puede modificar la diferencia temporal considerada en el cálculo del impuesto diferido.
- Provisiones: Existe una serie de conceptos contables fiscales que pueden verse modificados, por ejemplo: Honorarios por servicios profesionales pendientes de pago de una compañía constituida como Sociedad Civil, provisiones de empleados, etc.
- Pérdidas fiscales: Es considerado como un activo que puede beneficiar a la empresa en su futuro pago de impuesto sobre la renta, sin embargo, la principal limitante es su caducidad. Para efectos de los cálculos es necesario tener certeza que tendremos las utilidades futuras suficientes para que tengamos la oportunidad de utilizar dicho activo antes que su caducidad lo impida, sin embargo, la certeza es lo que menos probable tenemos debido a la gran volatilidad de los factores externos que afectan al país.
Sin duda cada negocio está siendo afectado en forma distinta. Por lo tanto la aplicabilidad y magnitud de los impactos dentro del cálculo también estará en función del propio ente económico.
Para evaluar este y otros efectos, en Aureus desarrollamos el DIAGNÓSTICO COVID, te invitamos a acercarte a nosotros y asegurar la operación de tu empresa.